SANTO DOMINGO.- Unos 1,700 alumnos de la escuela Básica Cancino Adentro, que se mantienen sin recibir docencia desde el 22 de diciembre, podrían ir de nuevo a clases el próximo 12 de febrero. Allí las clases fueron suspendidas, no sólo por la Navidad, sino debido a la situación de deterioro en que se encontraba el plantel.
Ahora se construye un nuevo recinto que se prevé esté listo en una semana y media, según informó la subdirectora del centro, Ana Julia Muñoz.
La mayoría de los estudiantes de este centro educativo recibían clases en estrechas y calurosas ®ranchetas® que se construyeron de manera provisional, y otros al aire libre expuestos al sol y a la lluvia. Paola Mieses, madre de uno de los alumnos, dice que “cuando llovía los niños se mojaban y llegaban a sus casas sucios de lodo”.
Agrega que la situación en que se encontraba la escuela no era digna de un ser humano que desea estudiar y aprender, debido también a su estrechez y sobrepoblación. En un aula tomaban clases unos 50 alumnos.
Andrés Rosado, director de la escuela, afirma que el plantel tampoco disponía de baños adecuados ni para los profesores ni para los alumnos y sólo contaban con unas 350 butacas en buen estado para una población de más de 1,700 alumnos.
Mientras se trabajaba en el primer edificio, se optó por alquilar diferentes viviendas para que se impartieran las clases, pero únicamente fue por dos meses, hasta diciembre pasado.
La subdirectora del plantel explica que ®la escuela tiene alrededor de un año y medio construyéndose y las clases están suspendidas desde diciembre®.
RecuperaciónInformó que como medida para recompensar el tiempo perdido, se procura extender el período de clases y darles un repaso general de las clases pasadas. La casa del saber cuenta con un total de 37 profesores que día a dia se dirigen allá a cumplir con su horario de trabajo con la esperanza de que algún alumno procure su ayuda.
®Los profesores cumplimos todos los días nuestros horarios. Vamos trabajando en los registros y poniéndonos al día”, afirma la profesora Nuris Terrero y ratifica que la construcción del primer edificio está casi terminada.